Los dientes son muy importantes a lo largo de toda nuestra vida, y para conservarlos en buen estado es necesario cuidarlos adecuadamente. Ya sea un bebé, un niño, un adolescente o un adulto, para todos hay cuidados bucales específicos adaptados a las necesidades de cada edad.
Si quieres saber más al respecto, ya sea porque tienes un hijo pequeño, adolescente o para cuidar mejor tus dientes, te invitamos a que sigas leyendo.
Cuidado bucal en bebés
Los dientes primarios o dientes de leche de la mayoría de los bebés salen aproximadamente a los seis meses de edad. Aunque éstos dientes temporales serán reemplazados posteriormente por los dientes permanentes (por lo general entre los 5 y los 7 años), son igual de importantes, por eso hay que cuidarlos desde el primer momento. Se recomienda limpiar las encías habitualmente ya después del nacimiento, para que el bebé se acostumbre a tener la boca limpia.
Para limpiar las encías del bebé (y los dientes cuando empiezan a asomar), se debe utilizar un paño húmedo y limpio. Este paño se pasa por las encías superiores e inferiores, repitiendo la operación por lo menos dos veces al día.
Una vez que los dientes aparecen, se debe utilizar un cepillo especial de cerdas suaves y agua, ya que no se recomienda el uso de dentífrico hasta que el bebé cumpla dos años.
Se debe evitar darle al bebé muchos líquidos azucarados a través del biberón, ya que pueden aparecer las famosas “caries dentales de la primera infancia”.
Cuidados de la salud bucal en niños
Como se dijo anteriormente, los dientes de leche son igual de importantes que los permanentes y es importante concienciar al niño de la importancia de mantener unos adecuados hábitos de higiene bucal. Para cuidar los dientes de tu pequeño se tienen que seguir estos puntos:
- Usar pasta dentífrica y cepillos especiales para niños.
- Acostumbrar al niño que use hilo dental (Existe un hilo dental infantil especial para niños).
- Evitar refrescos con altos niveles de azúcar.
- Acostumbrarlo a que beba abundante agua después de las comidas, para limpiar cualquier residuo de alimento o restos de azúcar.
- Hay que incentivarlo a que cuide sus dientes y se los cepille después de cada comida.
Cuidado bucal en los adolescentes
En la adolescencia pueden empezar a presentarse los primeros problemas con los dientes permanentes, especialmente si no se ha inculcado unos buenos hábitos en cuanto al cuidado dental ya desde la infancia. En esta etapa los adolescentes se pueden enfrentar a problemas como halitosis, ortodoncias o la aparición de las muelas del juicio. Es muy importante acudir regularmente al odontólogo para poder detectar lo antes posible cualquier afección dental, corregir posibles carencias en la higiene dental, y tomas medidas para preservar la salud bucal, evitando así problemas mayores en el futuro.
- Se debe cepillar los dientes por lo menos dos veces al día y usar hilo dental diariamente.
- La alimentación tiene que ser equilibrada, evitando la comida basura e incorporando un mayor consumo de frutas y verduras en la dieta.
- Los piercings bucales pueden ser dañinos para la salud bucal, por eso es fundamental informarse sobre los riesgos que conlleva y las medidas necesarias para reducirlos.
- Se debe evitar el consumo de tabaco, ya que a medio plazo ocasiona mal aliento y manchas en los dientes, y a largo plazo puede provocar problemas más graves.
- Si el adolescente tiene brackets, entonces se tiene que concentrar aún más en limpiar sus dientes, ya que los aparatos dentales suelen acumular restos de comida.
Cuidado bucal de adultos
El cuidado dental para los adultos es crucial, por eso se recomiendan revisiones constantes con el odontólogo, además de realizar limpiezas dentales cada seis meses.
- Uno de los principales problemas en la salud dental de los adultos son las caries, ya que pueden llegar a ocasionar la pérdida de piezas dentales. Para reducir el riesgo de caries es necesario reducir el consumo de productos azucarados y limpiar los dientes adecuadamente.
- El consumo de tabaco aumenta las probabilidades de sufrir un cáncer bucal, por lo cual es recomendable eliminar o al menos reducir todo lo posible su consumo.
- Para cuidar la salud bucal de los adultos es necesario cepillarse después de cada comida (o al menos dos veces al día), usar de vez en cuando enjuague bucal e hilo dental diariamente.